Una regresión lúdica es cuando el propósito de la regresión es satisfacer la curiosidad de saber si en una vida pasada fuiste vikingo, o hechicera, o sacerdotisa inca.
Si siempre has tenido una atracción especial hacia un país o una época de la historia, es posible que en otras vidas hayas vivido ahí y, algo dentro de ti, se acuerde. Algo así como una lejana intuición.
Puede ser una experiencia reveladora y que la disfrutes, y yo estaré encantada de conducirla. Per, de todas formas, hay que en cuenta una cosa importante: puede que veas una vida donde no te lo pasaste bien, una vida donde sufriste mucho, o donde hiciste sufrir. Es como abrir la caja de Pandora. Con la técnica de la regresión terapéutica ver una vida pasada de dolor no tiene mayor misterio: se hace el correcto anclaje a la vida actual y se cierra aquella vida en origen, por lo que se aprovecha esa vivencia para sanar lo que deba ser sanado.
Pero si no se hace el anclaje, a nivel personal, puede que la experiencia te deje un poco confuso; y tu motivación inicial de «flipar con la vida de vikingo» se convierta en un «Joee… y qué hago con esto ahora?»
Así que, dicho todo esto, si vas a hacer una regresión lúdica, asegúrate de que la persona que te la dirija conozca la técnica de la Regresión Terapéutica, para que cierre bien la sesión, para que vuelva a cerrar esa caja de Pandora.
En mi caso, puedo dirigir regresiones de forma presencial y en online, por videoconferencia; así que no importa la distancia física que nos separe.
Escríbeme o llámame y concertamos una cita.